La poda apical de la Marihuana
La poda apical es un método muy usado en exteriores e interiores para cortar la parte superior (ápice) de la planta de marihuana. Con este corte lo que producimos en la planta es parar el crecimiento vertical de esta, forzándola a producir más brotes.
Con la poda del ápice que le realicemos produciremos dos brotes nuevos en forma de Y, por lo que obtendremos un aumento de ramificación en la copa de la planta de marihuana y por consiguiente más cogollos que aunque serán más pequeños obtendremos muchísima más cantidad de estos.
Para poder realizar esta técnica de poda apical esperaremos a que la planta tenga un mínimo de 3 nudos, a partir de este punto la planta será capaz de resistir todas las podas que queramos o podamos realizarle a lo largo de su crecimiento. Tendremos que cortar justo por encima de las 3 hojas o ramas. De los últimos 2 últimos peciolos (tallos de la hojas) o ramas crecerán 2 ramas que le darán la forma de Y.
Al realizar la poda apical la planta de marihuana puede sufrir estrés, por lo que es recomendable hacerlo con cuidado y mantener la planta fuerte mediante el riego y abonado correctos. El corte debe de ser limpio, lo ideal es hacerlo con una tijera de poda de jardinería ya que están pensadas para tal fin. Si después del corte quedara un agujero grande, lo ideal es taparlo con pasta cicatrizante para plantas.
Si la planta llegara a estresarse podría bajar en gran medida su producción o incluso pararla. Hay variedades que no reaccionan adecuadamente a la poda apical ya que solo producirá 2 brotes que salen horizontalmente, de esta manera no producirá una buena copa central y solo sacaremos 2 cogollos pequeños. Unas de las variedades que no reaccionan bien a esta técnica son las Jacky White o la Cronic.
Poda apical de planta de marihuana en interior
Para el cultivo de interior, es una técnica en la que aprovecharemos el mismo espacio y no necesitaremos tantas plantas aunque habra que alargar el tiempo de crecimiento. El número de podas a realizar en las plantas dependerá del número de plantas que tengamos por m2, a mayor cantidad de plantas, menos podas podremos realizar.
Para que te hagas una idea con 9 o 10 plantas, realizaremos una sola poda y con unas 5 plantas de marihuana realizaremos un máximo de 3. Hay personas que solo usan una planta por metro cuadrado llegando a realizarle hasta 10 podas antes de hacerla florecer.
De esta forma obtendremos una producción muy eficiente con un menor número de plantas.
Poda apical de planta de marihuana en exterior
Al exterior esta opción es recomendable si no quieres llamar la atención ya que de esta manera obtendremos plantas de tamaño reducido. Cuando realicemos la poda apical al exterior, y gracias también a la luz del sol conseguiremos plantas más bajas y con una gran cantidad de ramas.
Cuando vallamos a realizar una poda apical en la planta de marihuana debemos de tener en cuenta que pararemos el crecimiento de la planta por lo que es recomendable cortar el mayor número de brotes para que ramifique lo máximo posible de una sola vez. Seguidamente cuando vuelvan a brotar las nuevas ramas volveremos a podar cuando tengan un mínimo de 3 hojas hasta el momento en el que comience la etapa de floración.
En exterior es recomendable de usar siempre pasta selladora para evitar plagas y hongos, de esta manera tendremos nuestra planta saludable y fuerte para la época de floración.
Con esta técnica obtendremos una planta pequeña y de forma redondeada, pero con mucha anchura y un gran número de ramas con la que sacaremos una producción superior a una de una planta de 3 metros.
El que prueba una vez esta técnica normalmente repite, ya que es un método optimizado de cultivo tanto por el manejo de la planta como para la producción de cogollos.
